La Fobia social es una Timidez exacerbada y se caracteriza por un temor continuo e incontrolable a enfrentar determinadas situaciones sociales. No se debe confundir con la timidez. Este tipo de fobia también la padecen los niños en su etapa infantil y puede provocar ansiedad, angustia y/o pánico. Esto hace que su relación con otros niños no se realice y que no se comunique. El niño, a veces, reconoce que el temor es excesivo y las situaciones sociales o actuaciones en público temidas se evitan o bien se experimentan con ansiedad o malestar intensos que interfieren con la rutina normal del individuo o bien producen un malestar clínicamente significativo. El miedo no puede explicarse por la presencia de otro trastorno. El manual aclara que se debe especificar si es generalizada, y que en los niños se debe dar entre otros niños de igual edad y debe prolongarse al menos 6 meses.
Las cosas son siempre peores en la imaginación que en la realidad. Lo mejor en esta situación sería convencer al niño sobre tomar la decisión de dejar de evitar todas esas situaciones por miedo y empezar a experimentarlas. Siempre que surja el miedo pregúntate: ¿lo has intentado alguna vez? ¿por qué estas tan seguro de que vas a fracasar si ni siquiera lo has intentado?
Siempre se puede afrontar una situación real, pero nunca podemos afrontar una situación imaginaria. En la imaginación siempre perdemos, por eso sólo podemos sufrir antes, y no durante o después de la situación temida. Por eso, intentarlo por medio de la experiencia, y sin prestar atención a nuestra imaginación, nos va a hacer perder ese miedo para siempre. Esto es lo que hay que intentar que piensen los niños y ayudarles a superar esta fobia que no trae nada bueno.
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