El pedagogo profesional tiene unas características propias y necesarias para su profesión. Hay personas que piensan que cualquiera puede desempeñar sus funciones, pero la realidad no es así.
Un pedagogo/a profesional debe tener en sí mismo las siguientes cualidades:
- Ser una persona positiva y que anime a los demás.
- Ser comprensivo/a con todos los alumnos, padres y también profesores.
- Ser amable, cordial, con buen humor y alegría.
- Ser un amigo/a en la lucha diaria por y para el aprendizaje.
- Ser una persona guía en el estudio y en el enfoque del aprendizaje (en función de la materia y del contenido a tratar).
- Persona con una paciencia infinita.
- Capacidad para replantear los temas, es decir, explicar los conceptos de formas diferentes; ya sea a través de ejemplos, situaciones diversas, dibujos, mímica…
- Saber estar y capacidad de diálogo con los alumnos.
- Persona que sin duda sabe escuchar a los demás y hace que se sientan escuchados.
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